Esta historia de suspense fue vista por 45 millones de suscriptores en su primera semana en la plataforma de vídeo. Se trata de una distopía protagonizada por Sandra Bullock, donde el mundo está invadido por una amenaza inexplicable contra la humanidad.
Para los que estamos en el público, las criaturas (o lo que sean) permanecen totalmente invisibles, representadas por una repentina ráfaga de viento, lo que las hace aún más aterradoras. En la película, cuando los humanos miran en su dirección, se sienten atrapados por un impulso inmediato e irresistible de suicidarse, normalmente golpeando la cabeza repetidamente contra la superficie dura más cercana.
Durante gran parte de la película, vemos a una Malorie (Bullock) y a dos niños calladamente obedientes (Julian Edwards y Vivien Lyra Blair) hacer su camino con los ojos vendados –una tarea que se vuelve más difícil cuando se ven obligados a pasar horas navegando en kayak por un río helado y turbulento–.
¿Qué ha pasado? ¿Cómo llegaron aquí? ¿Adónde se dirigen? La película ofrece respuestas –aunque no todas– retrocediendo cinco años, cuando una ola de suicidios espontáneos masivos estalla en todo el mundo. El caos estalla en el hospital donde Malorie, embarazada de seis meses, está viendo a un médico con su hermana. El frenético regreso de Malorie a casa se convierte en una valiente coreografía de acción digna del día del juicio final, con coches que se estrellan contra sí mismos y personas que gritan y huyen en masa, mientras una tras otra cometen el error de poner la vista en dirección a las criaturas.
En fin, si aún no la has visto, estás tardando. Todo el mundo está hablando de «A ciegas», el más reciente exitazo de Netflix.
Foto de portada: Netflix