Aunque parezca mentira, sí, es posible lavarse mal los dientes. Y, a pesar de que las caries y otros síntomas similares puedan tardar más en llegar, terminan llegando. Por eso mismo es muy importante preguntarte a ti mismo si te estás lavando los dientes de la forma correcta. Y, en caso de negativa, comenzar a mejorar. Pero, ¿cómo es la forma correcta?
¿Te estás lavando los dientes de la forma correcta?
Para empezar, no debemos simplemente mover el cepillo sobre nuestros dientes, sino que hay que seguir una dirección concreta. ¿Cuál? Pues «de dentro a fuera», es decir. Si nos cepillamos los dientes de la parte superior de nuestra mandíbula, de arriba a abajo, y si lo hacemos con los de la parte inferior, al revés.
De esta forma «sacamos» todos los residuos y suciedad que puedan quedarnos en los dientes en lugar de incrustarlos a más profundidad. Y, aunque pueda parecer mentira, más fuerte no significa mejor. Incluso puede ser perjudicial si nos pasamos a la hora de aplicar fuerza pudiendo llegar incluso a sangrar.
Dos minutos, la duración idónea
Otro factor a tener en cuenta es el tiempo que dedicamos al cepillado. Tiempo que, según Popular Science, debería rondar los dos minutos. Más tiempo de ese no aporta beneficios y un cepillado más corto puede ser insuficiente para eliminar toda la suciedad.
Si tenemos problemas a la hora de calcular el tiempo que llevamos, siempre podemos hacer uso de un cronómetro aunque la mayoría de cepillos eléctricos modernos nos avisarán cuando llevemos dos minutos de cepillado. De modo que no tendremos que preocuparnos.
En caso de duda, tu dentista es tu mejor consejero
Aunque, si tienes muchas dudas acerca de si te estás lavando los dientes de forma correcta, lo mejor es que acudas a tu dentista y le preguntes a él. Porque, ¿quién mejor que un profesional para aconsejarnos? Aprovechando así para hacerte una revisión y comprobar que todo va bien.
Porque, sobre todo en el terreno dental, es mejor prevenir que curar. Ya que un tratamiento puede no solo suponer una cantidad importante de dinero, sino que también puede conllevar muchas molestias y dolores.