Cuando se habla de gafas de sol, siempre hay un modelo concreto que se nos viene a la cabeza a la mayoría, las Ray-Ban Wayfarer. Pero claro, con toda la historia que tienen detrás, no podía ser para menos. Porque se trata de unas gafas que fueron capaces de marcar a toda una generación.
Y, además, se convirtió en un icono de la moda que lleva más de 40 años siendo lo más visto en todas las playas del mundo en cuanto el sol empieza a asomar.
¿De dónde salen las Wayfarer?
SI queremos conocer el origen de las Ray-Ban Wayfarer tenemos que remontarnos a 1952, año en el que se registra la patente. Momento en el que, contra la tendencia del momento, Raymond Stegeman decide crear unas gafas de sol con montura de acetato en lugar de metal.
Suponiendo, del mismo modo, una revolución cultural. Porque este modelo tan desenfadado causó furor entre los más jóvenes, que buscaban alejarse de las Aviator, tan relacionadas con el ejército.
El «boom» cultural
Sin embargo, y a pesar de su éxito inicial, con el paso de los años se convirtieron en las «gafas de padre» para muchos jóvenes. De forma que, cada vez más, comenzaron a caer en el olvido. Hasta que en los 80 comenzaron a verse en algunos éxitos hollywoodienses (como olvidar a Tom Cruise en «Risky Bussiness»). Lo que supuso un punto de inflexión para las gafas.
Así, el modelo pasó de vender 15.000 unidades al año a más de 360.000. Aunque claro, ¿quién no iba a comprarse las gafas que llevan los de «Corrupción en Miami»? Y es que hasta la mismísima Madonna se convirtió en fan incondicional de las gafas durante una época.
Del cine a la eternidad
Y, por supuesto, una vez que te has convertido en un icono del cine, las estrellas de Hollywood y, en definitiva, en unas gafas «molonas», no hay vuelta atrás. De forma que, unas gafas que casi caen del todo en el olvido se convirtieron en un auténtico icono cultural para millones de personas.
Tan buscadas están estas gafas que Ray-Ban duplicó sus ventas en 2007 cuando se lanzaron a reeditar el modelo original con un toque más «moderno» y estilizado. Demostrando que, aunque las Ray-Ban Wayfarer tengan casi 70 años, están más de moda que nunca.
Imágenes: Unsplash, Pixabay y Youtube.