Llega la temporada de cócteles y fiestas, y con ella llegan los canapés. Esos escurridizos pedacitos de cielo en bandejas que los camareros parece que ocultan. Aunque, gracias a estos trucos de Mónico Caterings, no se te escapará ni un solo canapé en los cócteles.
Y, aunque nunca sustituirán a una comida sentado como Dios manda, sí es posible salir del envite tan solo con canapés. Aunque para ello tengamos que estar ojo avizor.
Aléjate de la cocina
Y con esto no nos referimos a que te sientes al fondo. Sino a que dejes en paz a los pobres camareros que salen de ahí bandeja en ristre. Todos conocemos a ese familiar que espera a la puerta de la cocina como un hiena, y, si preguntamos a los camareros, seguro que ellos también.
Evitando convertirte en esa persona, no solo evitarás que te ignoren los camareros, sino que además facilitarás su labor. Lo que se traduce en que te llegará antes la comida a la mesa.
Además, por norma general, cada camarero tiene su zona de acción definida. Por lo que se abstendrán de ofrecerte comida si no estás dentro de sus mesas asignadas.
Fíjate en las mesas
Si se trata de un cóctel más informal, hay muchas probabilidades de que, además de camareros, haya mesas con bandejas de canapés. Por lo que no tendremos que esperar a que pase nadie cerca de nosotros para comer algo.
Aunque eso no significa que cojas una silla y te hagas dueño y señor de las bandejas, que hay más invitados.
Mantente cerca de los organizadores
Al final, como bien dice el refrán «Quien paga, manda» y en los cócteles no iba a ser menos. De modo que, si te fijas, seguro que puedes observar como, alrededor de los organizadores, hay mayor densidad de camareros y comida en general.
Esto no significa que atosigues para acceder a más canapés, pero manteniéndote cerca de los protagonistas seguro que consigues algún langostino extra.
No te quedes mirando a los camareros
Siempre vemos a alguien en la fiesta mirando a los camareros como si fueran la presa y ellos el león. No seas esa persona. En primer lugar, porque los camareros harán los posible por alejarse de ti. En segundo, porque los demás asistentes no se asustarán al verte.
Así que haz lo posible por romper con esa costumbre tan mala y liberar a los pobres camareros de esa mirada angustiosa.
Las bebidas también son importantes
Pero ojo, con moderación. Si de vez en cuando le pides al camarero una bebida, este terminará por relacionarte con ello. Algo positivo, ya que, si por casualidad queda una sola en la bandeja, es más probable que se te acerque casualmente y te mantenga hidratado.
Además, con tanto canapé en los cócteles, seguro que tenemos sed, así que un trago nunca está de más en estas situaciones.
La vuelta a la cocina
Si bien acosar a los camareros cuando salen de la cocina es algo que no debemos hacer, la vuelta es otra historia. Ya que, en este momento, estarán devolviendo «comida que sobra» y no tendrán problema en extenderte la bandeja si te acercas a ellos.
Atento a la posición de las bandejas
Si el camarero lleva la bandeja en una posición accesible, adelante, coge lo que quieras. Si, por el contrario, lleva la bandeja alta, lo correcto será no abordarle. Ya que, probablemente, esté volviendo con la bandeja vacía o se esté dirigiendo hacia su zona asignada.
Dos casos en lo que no nos ofrecerá comida. Además, es una forma velada de decir a los invitados que no se acerquen en ese momento. Y, si lo hacemos, podríamos terminar con la bandeja (y todos los canapés que lleve) en el suelo, y no queremos eso.
Trata bien a los camareros
Sin duda, la mejor forma de recibir un canapé en los cócteles. Porque es más probable que un camarero vuelva a ofrecernos comida o bebida si hemos sido amables con él. Además, no hay que olvidar que también son personas, y merecen todo nuestro respeto.
Imágenes: Pixabay y Unsplash