Si estás empezando en esto del deporte o estás probando cosas nuevas es más que posible que, tras un entrenamiento, te duela hasta el alma. Y si no te apetece andar yendo al médico o simplemente no creas que es para tanto, estás de enhorabuena. Porque te traemos 5 remedios caseros para el dolor muscular que harán desaparecer esas molestias.
1.- Zumo de Remolacha
Puede que en tu vida te hayas si quiera acercado a una remolacha, pero merece la pena que empieces a hacerlo. Y es que esta hortaliza de color más que reconocible (y que mancha un montón, por cierto) es una gran aliada a la hora de combatir los dolores derivados de entrenar.
¿La razón? La enorme cantidad de antioxidantes y nutrientes que contiene. Por eso mismo, un simple vaso de 250 ml de zumo de remolacha es uno de los mejores remedios caseros para el dolor muscular. Sobre todo si nos lo bebemos después de entrenar, para prevenir las agujetas.
2.- Café
Seguro que ya sabes que un buen vaso de café puede hacer que des lo mejor en ti a la hora de hacer deporte debido a la cafeína, ¿verdad? Pero es que resulta que también es una gran ayuda a la hora de prevenir el dolor derivado del deporte. Y es que si no quieres que parezca que te han dado una paliza, tómate un café antes de entrenar. Es una de las mejores ideas que puedes tener.
La ventana ideal para conseguir los mejores efectos se mueve entre los 30 y los 45 minutos antes del entrenamiento. De forma que el café que te tomas con el desayuno no cuenta, muy a nuestro pesar.
3.- Cerezas
Sí, esta fruta es uno de los remedios caseros para el dolor muscular. ¿Por qué? Porque resulta que tiene un potente efecto antiinflamatorio cuando la convertimos en zumo. Para evitar articulaciones y músculos hinchados lo ideal es beber unos 200 ml tanto antes como después de entrenar.
De esta forma reduciremos el impacto del deporte en nuestro cuerpo y combatiremos los efectos justo después. Consiguiendo combatir así la poca inflamación que pueda haber.
4.- Jengibre
Que el jengibre tiene propiedades medicinales es de sobra conocido en la cultura asiática. No en vano es parte importante de su gastronomía. Especialmente útiles son sus propiedades antiinflamatorias. Propiedades que pueden reducir hasta en un 24% el impacto del deporte sobre tu cuerpo.
Lo que supone una recuperación mucho más rápida e indolora. ¿Qué significa esto? Que tus agujetas serán mucho más leves y se irán mucho antes. La mejor forma de consumirlo es en infusión, pero también podemos añadirlo a nuestra comida como una especia.
5.- Zumo de Tomate
Si nos tomamos uno (o dos) vasos de zumo de tomate después de entrenar conseguiremos dos cosas. La primera, y más obvia, es hidratarnos. No solo por el alto contenido en agua de los tomates, que también, si no por todos los nutrientes que tiene.
La segunda cosa que conseguiremos es llenar nuestro cuerpo de nutrientes sin añadir prácticamente ninguna caloría. Es decir, todos los beneficios sin ninguno de los inconvenientes. ¿A qué esperas para hacerte una jarra?
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